Un panadero, un taxista y madre e hija se convirtieron ayer en nuevas
víctimas de la violencia criminal que ha tenido un repunte en los últimos días.
Los asesinatos se registraron en menos de 12 horas en los departamentos de
Sonsonate, La Paz y Usulután.
En este último encontraron los cadáveres de Ana Cristina Torres Mendoza, de
40 años, y de su hija, en un terreno del cantón Chaguantique de Jiquilisco.
fuente:elsalvador.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario