A casi dos meses del anuncio del presidente de la República, Mauricio Funes, de reforzar la presencia policial con apoyo disuasivo de la Fuerza Armada en los municipios más violentos del país, ayer, 200 agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) y miembros del Ejército iniciaron los patrullajes por las calles urbanas y los caminos rurales del municipio de Colón.
Escrito por Redacción de NaciónMiércoles, 12 agosto 2009 00:00
Se trata del tercer despliegue de agentes policiales y militares denominados grupos conjuntos de Apoyo Comunitario.
Los patrullajes coordinados en Colón se deben a que este es considerado por las autoridades del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública como uno de los seis municipios más violentos de todo el país.
Otros grupos similares se desplazan en San Salvador y Soyapango, también señalados en esa lista de violencia, junto a Apopa, Santa Ana y San Miguel.
Con el desplazamiento de los 30 grupos de entre seis y ocho policías y militares, las autoridades buscan lograr un mayor acercamiento con la población.
Entre los lugares que serán patrullados por estos grupos están el cantón El Cobanal, en donde en los últimos cinco años han sido asesinados una docena de personas, la mayoría jóvenes residentes del sector. Además, al menos tres menores se encuentran desaparecidos desde hace dos años. La presencia de las pandillas es evidente, la misma Policía la considera una zona peligrosa, difícil de ingresar.
En ese cantón, la PNC y la Fiscalía General de la República han descubierto en los últimos dos años tres cementerios clandestinos, donde han ubicado restos de algunas personas desaparecidas.
Los policías y los militares también realizarán patrullajes de acercamiento a la comunidad en el cantón El Botoncillal, a unos cinco kilómetros al norponiente de El Cobanal.
La historia de violencia en ese sector, identificado por su alta peligrosidad por el accionar de grupos de pandillas, es compleja, según las autoridades policiales. Como muestra de ello, el 12 de junio pasado, el profesor Julio César Aguirre fue ultimado frente a su lugar de trabajo, el Centro Escolar Ingeniero Roberto Quiñónez.
También reforzarán los patrullajes en el municipio de Ciudad Arce.
Fuente: La Prensa Gráfica
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